Los Artistas podemos contribuir con nuestro trabajo a promover ideas y crear puentes entre culturas que enriquezcan la globalidad .
Esa eliminación de barreras es la que me interesa plasmar en el terreno pictórico. Tengo en mente una obra que se extienda sin límites, con total libertad de ejecución.
En mi trabajo busco aglutinar una serie de factores de distinta índole que pueden estar presentes… La memoria individual, como elemento definitorio de la identidad. El sueño, como coadyuvante de nuestros deseos y temores. La experimentación, que propicia encuentros. La percepción de nuestra propia realidad, como materia que también construimos. La fantasía, como la única parcela de libertad que tenemos. El salto al vacío, sin miedo. Esa amalgama de conceptos y, sobre todo, como se interrelacionan, son los que me proporcionan una gran libertad formal a la hora de expresar las ideas que tengo en mente en cada momento, sin demasiadas normas que constriñan mi proceso de trabajo a la hora de ejecutar una idea sobre otra adyacente u obsoleta; todo es elección. Voy introduciendo algunas claves dentro del cuadro que transporten el pensamiento hacia mundos oníricos » paisajes» en los que no todos los elementos son reconocibles o poseen un rol determinado. Si, el proceso de metamorfosis entre las partes que se unen espacio-temporalmente propiciando un diálogo entre lo presente y el recuerdo del que proviene nuestro propio archivo de escenas mentales.
Esa comunicación inmediata llevada a las distintas esferas de la pintura es la que posibilita una visión del «todo» en su conjunto. La eliminación de fronteras y la convivencia entre todas las partes claramente diferenciadas de la obra.